Las marcas personales están asociadas a fortunas y relevancia a partir del impacto que generan sus decisiones dentro de cargos públicos o privados que ocupan.
Este argumento ha dado paso a un ranking que enlista a las 10 personas más poderosas en el mundo, comenzando con el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
El listado, elaborado por Forbes, incluye entre las personalidades más poderosas de este 2016 a Donald Trump, Angela Merkel, Xi Jinping, el Papa Francisco, Janet Yellen, Bill Gates, Larry Page, Nareda Morodi y Mark Zuckerberg, dentro de los primeros 10 lugares.
Este grupo de marcas personales con impacto mundial concentra a siete personalidades políticas y tres líderes dentro del mercado tecnológico, lo que nos demuestra que debido a la naturaleza social del mercado y el impacto de la tecnología en los consumidores, ambos segmentos son determinantes en la construcción de marcas personales de sus protagonistas.
En el caso de Vladimir Putin, su marca personal se encuentra en todo momento fortalecida por ser el presidente de un país cuyo valor de marca nación registra 736.000 millones de dólares, según Brand Finance.
Donald Trump se convirtió en una marca personal trascendental al dominar en un mercado de real state, donde logró desarrollar una marca y experiencia de la misma con la que logró dominancia al competir contra Hillary Clinton en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, un país que gobernará y liderará y que tiene un valor de 20.574 billones de dólares, según Brand Finance.
Del lado del mercado tecnológico tenemos a dos personalidades: Bill Gates y Larry Page, quienes cuentan con marcas personales que no sólo están fortalecidas por las fortunas con las que cuentan, 90.000 y 35.200 mdd respectivamente y de acuerdo a estimados de Bloomberg y Forbes. La trascendencia de sus marcas personales también se debe al valor de las marcas a las que están asociados: Microsoft con 121.820 millones de dólares, según Millward Brown, y Google con un valor de marca de 94.184 mdd, según Brandirectory.