París acaba de inaugurar un nuevo centro de entretenimiento de más de 3.300 metros cuadrados con el objetivo de hacer de la realidad virtual una experiencia más accesible y menos solitaria.
Una idea que nace de la mano de Productman y la agencia independiente Buzzman. El centro ha sido bautizado como Illucity. Ofrece un total de 20 actividades en las que pueden participar hasta 33 personas a la vez. El precio de las actividades oscila entre los 5,75 y los 40 dólares.
“La mayoría de las experiencias con realidad virtual suelen ser bastante decepcionantes. A menudo muchos equipos no están a la altura”, explica Françoise Phan, director asociado de Productman, y añade además que uno de los grandes problemas de la realidad virtual es que transmite la sensación de que únicamente puede disfrutarse en soledad. Todo ello motiva a Illucity a ofrecer la realidad virtual como una experiencia colectiva donde podemos ver jugar a otras personas.
El centro ha sido diseñado con colores brillantes y espacios dinámicos para transmitir una sensación de tecnología futurista. Incluso cuenta con efectos de sonido y áreas donde el suelo se mueve o vibra. Se trata de crear un espacio en el que “todos nuestros sentidos se sientan abrumados”.