Cuatro formas de reconectar con el corazón de los consumidores

Cuatro formas de reconectar con el corazón de los consumidores

coraz2La situación es así: los consumidores de hoy en día no están interesados en las marcas. Es más, al 90% de ellos les da igual si las marcas desaparecen de sus vidas y el 73% opina que las marcas que consumen son intercambiables.

Por lo tanto, atrás quedaron los tiempos en los que la fidelidad era uno de los mayores objetivos de las compañías: ahora la atención es la aspiración de las miles de firmas que luchan por conservar su hueco en el saturado mercado.

En un momento en el que un simple nombre ya no mueve a las masas a actuar, es hora de que el trabajo de las compañías hable por sí mismo. Pero para ello hay que llevar a cabo algunos cambios en el seno de las empresas y agencias con el objetivo de abordar las estrategias y la toma de decisiones de una manera radicalmente distinta.

Joe Parrish, partner y chief creative officer de The Variable, nos ofrece en The Drum, cuatro pautas para, al menos, no pasar desapercibidos ante el público:

  1. Conozca su propósito. En un momento en el que hay una escasa diferenciación en el mercado, las marcas deben encontrar su unicidad en el propósito, en su razón de ser que es, al fin y al cabo, lo que motiva la compra de los consumidores. Tal y como muy acertadamente asegura Simon Sinek, “la gente no compra lo que haces, compra el porqué lo haces” y por ello, antes de mover a los consumidores es importante que las compañías muevan a sus propios empleados a que se conviertan en los mejores prescriptores. Darles no solo un lugar al que acudir a trabajar, sino una razón para ello, es clave para trasladar la autenticidad de marca desde dentro hacia fuera.
  2. coraz3Valores compartidos. Aunque establecer un propósito es cada vez más habitual en las compañías, se suele caer en el error de no compartirlo más allá de la cúpula. Sin embargo, cuando se trata de comunicar el porqué de una marca es esencial que todos los trabajadores, desde el primero hasta el último de la cadena, conozcan el motivo de su trabajo y el objetivo que se persigue.
  3. Desarrolle productos, servicios y experiencias con valor añadido. Puede que hasta ahora los consumidores hayan aplaudido, se hayan reído e incluso se les haya caído una lagrimilla con las piezas publicitarias en forma de spot de las marcas. No obstante, con el nuevo nivel de exigencia que han establecido, crear un anuncio bonito o divertido ya no es suficiente. Hay que ir un paso más allá para ofrecer a los consumidores una relación diferencial con la marca a través de productos y experiencias que aporten un valor añadido. Para ello a no dudar en echar mano de colaboradores que ayuden a salir de la zona de confort de las agencias y a satisfacer la creciente demanda de valor añadido de los consumidores.
  4. Apueste por una comunicación que impacte y mueva a la acción. En la industria publicitaria ya no basta con hacer solo publicidad. Es hoy más necesario que nunca comunicar de una forma diferente, impactante y relevante, capaz de sobresalir y hacerse un hueco entre los quehaceres de los consumidores. Conseguirlo dependerá, en buena medida, de la implicación de la agencia en la estrategia de la marca desde el principio. Solo así podrá estar en posición de crear un trabajo auténtico y atractivo que mueva a la acción a los consumidores y consiga, si no su fidelidad, al menos su atención.