Durante los últimos dos años nos hemos acostumbrado a vivir pendientes de las videollamadas, si bien muy útiles, nos hacen difícil poner un alto a la hora de desconectar del trabajo. En torno a este tema orbita precisamente el inquietante spot de la agencia británica Wonderhood Studios.

El protagonista del anuncio es Gary, un padre de familia enfrascado en la que parece la última videollamada de la jornada mientras su esposa y sus hijos se preparan para celebrar la Navidad. Sin embargo, cuando la mujer y los hijos de Gary acuden a buscarlo se topan con una situación absolutamente surrealista: el bueno de Gary está atrapado en una videollamada dentro del ordenador.

Después de múltiples e infructuosos intentos para liberar a Gary, la familia trata de aclimatarse como puede a la situación y el protagonista intenta disfrutar de rituales típicamente navideños desde el portátil en el que está aprisionado.

Las cosas no resultan según lo previsto. Gary y su esposa tratan de tener sexo virtualmente, pero la pantalla que les separa impide que les suba la libido y su relación va gradualmente resintiéndose.

Desde el ordenador, Gary tiene que contemplar cómo su mujer coquetea con otro hombre y sale sola de fiesta, lo cual acaba en una bronca monumental que lleva a la esposa a poner en «mute» a su marido.

Al final, el espectador es testigo de una escena absolutamente devastadora que tiene lugar al calor de la cena de Navidad. Uno de los hijos de Gary entrega un regalo a su progenitor colocando el obsequio sobre el portátil en el que ahora habita, cerrándolo y diciendo «By Daddy!» (¡Adiós papi!). «Remember to switch off this Christmas» (Recuerda desconectar esta Navidad) es el lema que pone colofón al spot de Wonderhood Studios.

Protagonizan el anuncio los actores Daniel Barker y Kerry Howard. Producido por Odelay Films, el spot fue dirigido por Joe & Tim y escrito por Jack Croft y Stacey Bird, ambos de la agencia Wonderhood Studios.

Los acordes del emblemático villancico Carol of the Bells, interpretado para la ocasión por el coro Bristol University Singers, ponen el perfecto contrapunto sonoro al anuncio.

«Hemos pronunciado muchas veces la frase ‘Estoy atrapado en una videollamada’ a lo largo de este año«, comenta Jack Croft. Y Bird añade: «Por eso, se nos ocurrió que pasar el día de Navidad atrapado en un videollamada podía ser realmente aterrador. El spot está concebido para hacer estremecer a quienes habitualmente trabajan desde casa y animar a los jefes a dejar aparcadas las videollamadas durante la Navidad», enfatiza.