El merchandising es una estrategia que tiene como fin último el hacer crecer en el imaginario colectivo la imagen física de la marca o proyecto en concreto. Ya sea a través de obsequios o poniendo a la venta una serie de objetos con logos corporativos, suele ser una acción de marketing muy eficaz.
Ese impacto visual es muy importante porque es inmediato, reconocible y fácilmente recordable. Por todo ello es que muchas firmas se decantan por hacer regalos personalizados de empresa a sus clientes, proveedores o visitantes a stands o tiendas. La variedad puede ir desde llaveros a tazas, paraguas o bolígrafos. También se ha puesto muy de moda que los elementos que se regalan o con los que se obsequian a trabajadores, clientes u otros agentes sean reciclados y ecológicos. Una tendencia que, sin duda, también habla de la preocupación de la firma por el entorno.
Llegados a este punto, hay que decir que la técnica del merchandising promocional es una estupenda estrategia publicitaria de las denominadas convencionales. Es así porque se obtienen retornos de la inversión y beneficios mucho mayores que con otro tipo de promociones. Además, no solo ayuda a promocionar una compañía, sino que también mejora tanto la percepción como la imagen y la reputación que los usuarios tienen de ella.
En esa línea, hay que evidenciar la importancia de contar con un perfecto proveedor de esos productos mercadotécnicos. Optar por servicios de una empresa de reconocido prestigio y trayectoria, pues es la forma de cerciorarse de trabajar con los mejores profesionales, los productos de más alta calidad y resolución, además de poder elegir entre una gama amplia para dotar a ese merchandising.
En definitiva, el merchandising promocional es una de las formas más efectivas que las empresas tienen para halagar con un detalle a clientes, proveedores o a la propia plantilla, y también es ideal para lanzar, promocionar y afianzar en el imaginario colectivo la imagen de la marca.